Debido a la prolongada persistencia de los anticuerpos anti-HBc tras una hepatitis B vírica, la determinación de los anticuerpos anti-HBc proporciona información inmejorable acerca de la prevalencia del virus de la hepatitis B en un grupo de personas en particular. La determinación de los anticuerpos anti-HBc junto con otras pruebas de la hepatitis B, permite el diagnóstico y seguimiento de la infección por el virus de la hepatitis B. Frente a la ausencia de otros marcadores de la hepatitis B (personas negativas para el HBsAg), los anticuerpos anti-HBc pueden constituir el único indicador de la presencia de una infección por el virus de la hepatitis B.