La beta 2 glicoproteína I (B2-GPI), conocida anteriormente como apolipoproteína H, es una proteína plasmática de 44 kDa, identificada como una de las moléculas cofactores requerida para la óptima unión de los anticuerpos antifosfolípidos y los fosfolípidos cargados negativamente. Se caracteriza por ser altamente glicosilada facilitando la unión a fosfolípidos, como cardiolipina, receptor de apolipoproteína E, fosfolípidos de membrana y otros grupos que contienen fosfolípidos aniónicos. Presenta importante función en la coagulación y procesos apoptóticos, representa un autoantígeno en pacientes con enfermedad autoinmune con presencia de anticuerpos antifosfolípidos, induciendo el aumento de riesgo de trombosis venosa, arterial y trombocitopenia. La detección de anticuerpos B2-GPI IgM, indica el inicio de la enfermedad autoinmune y la presencia de anticuerpos IgG, correlaciona el estado y progreso de las manifestaciones de la enfermedad autoinmune del síndrome antifosfolípido.